SAN LUIS, Misurí, El destino simplemente había marcado a los Cardenales de San Luis: nada ni nadie iba a ser capaz de frenarles.
El equipo que nunca se amilanó se consagró como
campeón de la Serie Mundial por 11ma vez en su historia al vencer 6-2 a los Vigilantes de Texas.
En el primer séptimo juego en una Serie Mundial desde 2002, Chris Carpenter exhibió su casta al lanzar seis entradas para los Cardenales con tres días de descanso. Además, los inesperados héroes David Freese y Allen Craig volvieron a ser fundamentales con sus bates.
Craig conectó un jonrón que le dio la ventaja definitiva a San Luis en el tercer episodio y Freese bateó un doble remolcador de dos carreras que sirvió para borrar de inmediato una ventaja madrugadora de Texas, que pagó muy caro el descontrol de sus lanzadores.
San Luis ganó el campeonato menos pensado tras un año cargado de vicisitudes desde el mismo inicio de la pretemporada cuando su estelar abridor Adam Wainwright quedó descartado por una lesión.
Una noche después de sobrevivir tras encontrarse dos veces a un strike de quedar eliminado, San Luis se convirtió en el 19no conjunto en la historia que voltea una desventaja 3-2 en el Clásico de Otoño para consagrarse.
Para el deleite de un lleno total de 47.399 aficionados en el Busch Stadium, Jason Motte retiró a David Murphy con un elevado al jardín izquierdo para el último out.
"Este equipo se merece esto por todo lo que tuvimos que pasar. Esta organización es de primera... esto definitivamente es un sueño hecho realidad", dijo Freese, quien fue galardonado como el Jugador Más Valioso. "Esto es por lo que uno sigue luchando... estoy muy feliz de formar parte de esto".
Dirigidos por Tony La Russa, los Cardenales festejaron otra corona más y la primera desde 2006. También se consolidaron como el segundo equipo con más títulos de las Grandes Ligas, sólo detrás de los 27 de los Yankees de Nueva York.
"Es complicado explicar cómo fue que esto pasó", declaró La Russa.
"Creo que todo comenzó en el último mes de la temporada, fue cuando todos nos unimos", dijo Pujols, el estelar primera base dominicano que pudo haber jugado su último partido con el uniforme de los Cardenales. "Todos empezaron a ser decisivos. Todo eso siguió en la postemporada. Es un orgullo ser un Cardenal y ser campeón".
Pujols será agente libre, pero muchos confían que se mantendrá con el equipo.
Fue un triste desenlace para los Vigilantes, el primer equipo que sucumbe en dos clásicos consecutivos desde Atlanta en 1991-92.
No hay comentarios:
Publicar un comentario